Antes de mudarnos a nuestra nueva casa, decidimos reemplazar todos nuestros muebles viejos. Como resultado, nos hacía falta un juego de comedor.
Después de buscar un poco (tanto en línea como en las tiendas), decidimos que no queríamos pagar por un comedor nuevo, así que comenzamos la cacería de uno usado. Un tiempo después, encontramos uno que estaba en perfectas condiciones, por un tercio de lo que nos hubiese costado comprarlo nuevo en la tienda. Aunque no era necesariamente nuestro favorito, vimos el potencial de mejorarlo con un poco de cariño.
Lo trajimos a casa, lo pusimos en su lugar y… sí, necesitaba cariño. Nuestro piso es de madera color marrón oscuro, el juego de comedor tiene un acabado similar, tabaco oscuro cálido, y asientos de imitación de cuero marrones. Fue así como obtuvimos lo que yo nombré “La Esquina Marrón”. Dicho esto, debíamos hacer algo para avivarlo… y lo primero en lo que pensamos fue en retapizar los asientos.
RETAPIZANDO LAS SILLAS DEL COMEDOR
Nunca habíamos tapizado nada antes, así que, cuando recibimos una invitación para hacer de voluntarios en un proyecto de retapizado (no requerían experiencia previa), no sólo obtuvimos la oportunidad de ayudar, sino también la oportunidad perfecta para aprender cómo retapizar sillas.
HERRAMIENTAS Y MATERIALES NECESARIOS PARA RETAPIZAR SILLAS
La tarea resultó ser sorpresivamente fácil, y lo mejor de todo es que no tienes que buscar un montón de herramientas o materiales para hacerlo. Todo lo que necesitas es:
- Tela
- Destornilladores (plano o de paleta, y de estría, estrella o cruz sólo en caso de que tus sillas tengan esta clase de tornillos)
- Pinzas de Punta de Aguja
- Cinta Métrica de Costura
- Regla (Opcional)
- Lápiz para Marcar Costura
- Una buena Tijera
- Grapadora de Alta Resistencia
- Grapas T50 (No son necesariamente grapas para tapizar, pero ya las teníamos y funcionaron bien)
- Lentes de Seguridad
- Guantes – Los sugerimos aunque no teníamos unos que fuesen adecuados para esta tarea 🙂
PASO 1: ENCONTRANDO LA NUEVA TELA
Antes de salir y hacer la compra quisimos investigar un poco. No queríamos comprar una tela que se viera muy bien pero terminara manchándose o dañándose en poco tiempo.
Después de leer y leer, decidimos que queríamos tela para exteriores. Este tipo de tela es más duradera y es sometida a un proceso de tratamiento químico durante su fabricación que garantiza resistencia a las manchas y al moho. Esto es extremadamente conveniente, considerando que estas sillas podrían estar expuestas a derrames de alimentos y bebidas.
Otro detalle era saber cuánta tela necesitaríamos… Muchos sitios de internet tienen calculadores de tela. Nosotros usamos el de Joann.com, que está en “Ideas, Tips & Guides”, cuando expandes el vínculo “Shop” y colocas el mouse o ratón en la sección “Home Decor Fabric” (la página está en inglés pero si siguen la ruta, la sección de cálculo es bastante ilustrativa).
Luego fuimos a la tienda Joann en nuestra área (de la cual me enteré en el proyecto de voluntariado), armados con muchos cupones de descuento. Después de debatir, comparar, ir de pasillo a pasillo muchas veces (la indecisión es una de mis debilidades, doy gracias a Dios por la paciencia de mi esposo), finalmente tomamos una decisión, y gracias a los cupones terminamos pagando 9 dólares por yarda! Fabuloso!
Algo importante que debes tener en mente… Como la cubierta de imitación de cuero que tenían nuestras sillas estaba en perfectas condiciones, decidimos que no la removeríamos, sino que retapizaríamos encima de esta. Si decides hacer lo mismo, determina si la tela que vas a usar es lo suficientemente gruesa u oscura para esconder completamente la que estará debajo. Esto era muy importante para nosotros porque la tela que escogimos era mucho más clara que la que estaba en los asientos. Así que hicimos unas pruebas en la tienda, colocándola encima de varias telas oscuras para prevenir una gran desilusión.
Ahora estábamos listos para divertirnos en casa!
PASO 2: REMOCIÓN Y PREPARACIÓN DE LOS ASIENTOS
Este paso es realmente fácil, dependiendo del tipo de sillas que tengas. En nuestro caso, las sillas sólo tenían los asientos tapizados (los respaldos son hechos de madera, como pueden ver en la foto) y unos pocos tornillos los mantenían en su lugar.
Procedimos a tomar el destornillador para quitar los asientos. Una vez que esto estaba listo, levantamos las grapas que sostenían la cubierta anti polvo en el reverso del asiento (no todas las sillas la tienen), insertando un destornillador plano o de paleta por debajo de estas. Luego, las sujetábamos con una pinza de punta de aguja y con un movimiento circular las sacábamos. Halarlas puede resultar un poco peligroso.
El asiento también tenía un par de grapas en el centro, sosteniendo la cubierta anti polvo. Sin embargo, estas no las removimos porque el plan era reusar la cubierta, y no impedían la colocación de la nueva tela.
PASO 3: MEDICIÓN, CORTE Y COLOCACIÓN DE LA TELA
Este paso es también muy fácil. Sólo coloca el asiento encima de la tela (puedes usar una regla y un lápiz para marcar costura si quieres ser preciso), y córtala dejando aproximadamente 6 pulgadas de exceso alrededor de todo el asiento (como puedes observar en la foto). Esto dependerá de qué tan gruesos sean tus asientos, pero esa cantidad fue suficiente para los nuestros.
Si tu tela tiene un patrón, presta atención a cómo la colocas, asegurándote de que el patrón luzca como lo quieres (si tiene rayas, y quieres que estén en una dirección o la otra, o si te importa la simetría, asegúrate de que luce simétrico antes de graparla). Si, por otro lado, estás buscando lo que yo llamaría un estilo “casual espontáneo”, entonces ignora esta sugerencia. 🙂
No es un gran problema si ya pusiste algunas grapas y te das cuenta de que la tela no esta en la dirección en la que la querías. Sólo repite el paso 2, reacomoda la tela y comienza a grapar de nuevo.
Presta especial atención al lugar en el que están ubicados los huecos de los tornillos en el asiento y manténlos libres de grapas. Si grapas en ellos, no podrás volver a atornillar el asiento a las sillas al terminar el retapizado.
Grapa un lado, luego hala el lado opuesto firmemente. Recomendamos que evites dejar arrugas en la tela. Si no está lo suficientemente estirada, cuando la gente se siente en las sillas las arrugas aparecerán, lo que a nuestro parecer hace que se vean viejas y usadas.
Para retapizar el banco, se sigue casi el mismo procedimiento. Primero grapamos los lados mas anchos, y luego los más angostos.
Las esquinas son un poco engorrosas. Debes encontrar una forma de doblar la tela en el reverso, de manera que los dobleces no se noten en la parte de arriba. Lo que nos funcionó a nosotros fue halar el centro y graparlo, y luego halar el lado izquierdo hacia la derecha y viceversa, y colocar las grapas. Recomendamos que se halen los lados, se sostengan en esa posición y se mire la parte de arriba del asiento para asegurarse de que esté liso. Algunas veces tienes que halar un poco más o un poco menos para lograr que quede bien.
Después de que la tela ha sido grapada por todo el contorno del asiento, corta el exceso y grapa la cubierta anti polvo (si tus sillas la tienen). Casi listo!!!
Finalmente, atornilla los asientos a las sillas y has terminado! Ahora tienes sillas que lucen como nuevas, más la satisfacción de haber aprendido a hacer algo por lo que normalmente habrías pagado.
Para acentuar aún más el juego de comedor, unos días después col0camos una alfombra.
Esperamos que disfrutes de tus sillas “nuevas” tanto como nosotros estamos disfrutando de las nuestras!!!
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