¡En nuestro hogar la organización tiene prioridad! Cuando notamos que algo necesita ser organizado, inmediatamente lo ponemos de primero en nuestra lista de cosas pendientes.
Un buen ejemplo, son los libros en la habitación de nuestro niño. A él le encanta leer, y ha estado coleccionando bastantes libros últimamente. Inicialmente, se le organizaron sobre su cómoda, sin embargo, a medida que fue obteniendo más y más libros, eventualmente la cómoda parecía no ser el lugar adecuado para ellos. Estaba comenzando a verse un poco desordenada. También se le estaba haciendo un poco difícil para encontrar los libros que quería leer y mucho más difícil mantenerlos organizados luego de sacarlos y colocarlos nuevamente en la pila.
Como resultado, decidimos construirle unas repisas flotantes para libros.