Cómo Hacer Repisas Flotantes

Alguna vez te has preguntado cómo es que funcionan esas repisas flotantes, aparentemente mágicas, que salen de las paredes mientras algo invisible las sostiene en su lugar?

Yo lo hice por un buen tiempo. Y me encantaba como se integraban a los espacios sin un soporte aparente. Así que un día, mientras mi esposo y yo contemplábamos algunas de nuestras paredes aún vacías (nuestro proceso de decoración de la casa no ha terminado), decidimos que queríamos repisas flotantes en una de ellas.

Por supuesto, no pensábamos pagar por ellas. Sería otro de nuestros proyectos. Justamente un buen amigo que es contratista nos regaló una madera, que pensaba desechar si nadie la quería. Hicimos una lista rápida de lo que necesitábamos para asegurarnos de que no nos faltara nada, y sólo terminamos comprando una de las cosas (el lápiz de masilla), ya que el resto de los materiales los teníamos de otros proyectos. Esta es la lista:

• Madera Contrachapada
• Listón de Álamo (5 cm x 5 cm)
• Cinta Métrica
• Lápiz
• Escuadra
• Sierra de Mesa
• Lijadora (Opcional) & Papel de Lija (granos 60, 120 y 220)
• Pistola de Clavos ( 5 cm calibre 16) & Clavos
• Trapo
• Guantes de Goma o Nitrilo
• Plástico (para cubrir la superficie en la que se va a teñir la madera)
• Tinte para madera (usamos el Nogal Oscuro de la encimera de la oficina)
• Lápiz de Masilla para Madera (Blend-Fil)
• Nivel
• Tornillos & Taladro

CREANDO TUS PROPIAS REPISAS FLOTANTES

PASO 1: MEDICIÓN Y CORTE DE LA MADERA

Primero decidimos el tamaño de las repisas. Queríamos que fuesen 30.5 cm de ancho x 76.2 cm de largo x 7.6 cm de alto, así que procedimos a usar nuestra cinta métrica, escuadra y lápiz para marcar la madera contrachapada. Luego, usamos nuestra sierra de mesa para hacer los cortes, y creamos dos piezas laterales (28.5 cm x 7.6 cm), una pieza superior y una inferior (72.4 cm x 28.5 cm) y una pieza frontal (76.2 cm x 7.6 cm) para cada repisa (hicimos dos). También cortamos dos piezas de la madera de álamo (61 cm de largo), para crear un soporte para cada repisa.

 

PASO 2: ENSAMBLAJE Y LIJADO DE LAS REPISAS

Con la pistola de clavos (usando clavos de 5 cm calibre 16), unimos las piezas para crear los “cajones” huecos que serían nuestras repisas.

Luego, usamos la lijadora para alisar la superficie de las mismas. Como iban a estar ubicadas en la parte de arriba de la pared, no sentimos la necesidad de que quedaran muy suaves, por lo que sólo usamos papel de lija granos 60, 120 y 220 (en contraste con nuestra fabulosa mesa de centro, con la que nos esforzamos muchísimo para que la superficie quedara súper lisa, ya que queríamos que pareciera que la habíamos comprado en una tienda elegante, y que íbamos a tener acceso directo a ella).

 

 

PASO 3: RELLENANDO Y APLICANDO TINTE A LAS REPISAS

Con el lápiz de masilla para madera rellenamos los huecos que quedaron luego de clavar las piezas. Es muy fácil de usar y deja un acabado suave y liso.

Como queríamos que las repisas combinaran con el resto de la madera en nuestra sala, decidimos usar el mismo tinte Nogal oscuro que habíamos usado en la encimera de la oficina, y con un trapo, aplicamos dos capas del mismo. En este paso, tienes mucha libertad de jugar con la cantidad de barniz para lograr un tono mas claro u oscuro, o incluso puedes usar pintura si lo prefieres.

 

 

 

 

* Independientemente de que vayas a barnizar o pintar las repisas, recuerda comprar una masilla de un color similar al tinte o pintura, para que esta no resalte una vez que hayas terminado. Si tu masilla puede pintarse o teñirse, no te preocupes por esto, pero no todas tienen esta capacidad.

 PASO 4: INSTALACIÓN DE LAS REPISAS EN LA PARED

Aquí es cuando sucede la magia! Luego de decidir la posición exacta en la que queríamos cada repisa, tomamos los listones de álamo, y usamos nuestro nivel y lápiz para marcar la pared, asegurándonos de que estuviesen niveladas.

Con el taladro y unos pocos tornillos fijamos las tablas a la pared. Ahora nuestros soportes “invisibles” estaban en su lugar.

 

Luego montamos una de las repisas, encajando el lado hueco en uno de los listones de álamo, y con otros tornillos unimos cada repisa a estas, insertando los tornillos paralelos a la pared, en el tope de las repisas. De esta forma, no serían visibles desde la parte inferior o frontal.

 

 

PASO 5: COMPRA OBJETOS DECORATIVOS PARA TUS REPISAS!

Es broma. No hay paso 5… Disfruta decidiendo qué colocarás en tus nuevas repisas flotantes “mágicas”. Nosotros nos divertimos mucho! Y lucen súper bien, no?

 

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